Domingo 24 de agosto de 2025,
Ruta de Ogíjares a Moraleda de Zafayona pasando por:
- Pasarela sobre el Río Genil (10,3 km).- Desembocadura del río Dílar en el río Genil.
- Puente de los Vados (13,1 km).- Pista paralela al río Genil, bajo el puente.
- Torre Roma (25,3 km)
- Castillo e Iglesia de Láchar (30,8 km)
- Vértice Geodésico Loma Alta (38,2 km, altitud.- 660 m).- Panorámicas impresionantes.
- Lomas de Taura (42,2 km).- Remanso de tranquilidad.
- Vértice Geodésico de Arache (43,5 km, altitud: 628 m).- Panorámicas espectaculares.
- Brácana (46,3 km).- Paramos en la fuente de la iglesia a reponer fuerzas.
- Presa de Villanueva (50,2 km).- Se trata de una presa o azud inundable de derivación de las guas del río Genil hacia canal de riego de las vegas de Villanueva y Huétor Tájar. El río Genil lleva poca agua, mucho menos que otros años, cuando el agua sobrepasaba el dique.
- Villanueva Mesía (55 km)
- Cruce del río Cacín y Choperas (55,5 km)
- Cuesta de Los Lujanes (59,5 km)
- Moraleda de Zafayona (63,5 km)
La ruta comenzó en Ogíjares, con la ilusión de encadenar kilómetros por la Vega de Granada hasta alcanzar tierras del Poniente. El frescor de la mañana y el murmullo de los primeros pedales anunciaban que la jornada iba a ser larga pero muy disfrutable.
Tras un rodar en suave descenso por la pista paralela al río Dílar, el primer punto destacado fue la pasarela sobre el río Genil (km 10,3). Desde allí se contempla la desembocadura del río Dílar en el Genil, un encuentro de aguas que marca el pulso de la Vega. La pista nos llevó enseguida hasta el Puente de los Vados (km 13,1), cruzando bajo su sombra por la pista paralela al río, uno de esos tramos en los que se agradece el terreno llano y la buena rodadura.
La ruta continuó rumbo a la Torre de Roma (km 25,3), testigo de historia en mitad de la llanura, y poco más adelante apareció el Castillo de Láchar (km 30,8), erguido como guardián medieval de estos caminos.
El esfuerzo físico llegó al afrontar la subida al Vértice Geodésico de Loma Alta (km 38,2, 660 m). La pendiente exigió piernas, pero la recompensa fue inmensa: panorámicas impresionantes de toda la Vega de Granada, con Sierra Nevada al fondo y el Poniente extendiéndose hacia el horizonte.
Tras la bajada, la ruta regaló un tramo sosegado en las Lomas de Taura (km 42,2), un verdadero remanso de tranquilidad. Poco después, coronamos otro punto clave: el Vértice Geodésico de Arache (km 43,5, 628 m), desde donde las vistas también merecieron una pausa.
El paso por Brácana (km 46,3) fue ocasión para parar en la fuente de la iglesia y reponer fuerzas con agua fresca, un alivio siempre agradecido en mitad de la ruta. Desde aquí y a través de la Hoya de Brácana, el terreno nos llevó hacia la presa de Villanueva (km 50,2), un azud de derivación que canaliza las aguas del Genil para regar las vegas de Villanueva y Huétor Tájar. Este año, sin embargo, la estampa fue distinta: el río bajaba con poca agua, muy lejos de los caudales de temporadas pasadas en que el dique quedaba desbordado.
Con el Genil siempre cerca, llegamos a Villanueva Mesía (km 55), tramo ya más cómodo que permitió rodar con ritmo fluido y charlar mientras las piernas seguían sumando kilómetros. El cruce del río Cacín y el paso por las Choperas fue mágico.
Datos técnicos y track de la ruta:
Las fotos:
El vídeo: